TEMA SEÑOR, ¡DAME TU PALABRA! TEXTO: 1 PEDRO 1:24-25 24 Porque: Toda carne es como hierba, Y toda la gloria del hombre como flor de la hierba. La hierba se seca, y la flor se cae; 25 Mas la palabra del Señor permanece para siempre. Y esta es la palabra que por el evangelio os Continúa leyendo SEÑOR, ¡DAME TU PALABRA!
1Pedro 5:10-11 - El propósito del sufrimiento. "Y después de que hayáis sufrido un poco de tiempo, el Dios de toda gracia, que os llamó a su gloria eterna en Cristo, El mismo os perfeccionará, afirmará, fortalecerá y establecerá. A Él sea el dominio por los siglos de los siglos.
Antesde darnos un chapuzón en los versículos de hoy, recordemos cómo finalizaron los anteriores, Pedro resaltó que para aquellos que creen, Cristo es de gran valor, pero para los que no, es Sedsobrios y velad. Vuestro adversario, el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quién devorar. 5:8 — “Sed sobrios, y velad”. Sobre “sobrios”, Véanse 1:13 y 4:7, comentarios. Estos dos verbos, ser sobrios y velar, aparecen así juntos también en 1Ts 5:6. El sobrio tiene control de sí en toda circunstancia.Jehováse interesa por usted. ¿CÓMO puede estar seguro de que eso es cierto, de que Jehová de verdad se interesa por usted? Una razón es que la Biblia lo dice claramente. 1 Pedro 5:7 dice: “A la vez que echan sobre él toda su inquietud, porque él se interesa por ustedes”. ¿Qué pruebas tiene de que Jehová se interesa por usted?Noshabló de la gracia que se nos es dada por medio de Jesús, predicada por los profetas ( 1 Pedro 1:10 ). Ahora va más allá, escribiendo acerca de la gracia que se os traerá cuando Jesús regrese. La única manera en que podremos estar parados frente a Jesús en ese día será por el favor inmerecido que nos da y nos dará.
Abraconmigo esta mañana en el libro de 1 Pedro 5:6-11. El cristianismo, en sus comienzos, fue visto como una facción judía. Hacia mediados del primer siglo se estableció como
1Pedro 4:7-11Reina-Valera 1960. 7 Mas el fin de todas las cosas se acerca; sed, pues, sobrios, y velad en oración. 8 Y ante todo, tened entre vosotros ferviente amor; porque el amor cubrirá multitud de pecados. 9 Hospedaos los unos a los otros sin murmuraciones. 10 Cada uno según el don que ha recibido, minístrelo a los otros, como buenos PqbA.